En qu medida ayudan las redes sociales para el posicionamiento en buscadores
El prejuicio es uno de los mayores desafíos a vences por las empresas que necesitan desarrollar una estrategia comercial en las redes sociales.
El prejuicio comienza cuando el empresario estima contratar un profesional que desarrollará esa estrategia, y emprende la búsqueda que coincida con dos hechos: un SEO Posicionamiento, y a su vez un conocedor del negocio que pretende colocar.
Ambas situaciones que impiden la fluidez en el proyecto, que se debería comenzar con otros parámetros de comparación.
EL primer paso, en realidad, es comprender que los factores de difusión en Internet no se ajustan a ninguna idea que pueda dar resultado en el mundo real, usará algunos de sus conceptos, pero no sus métodos.
Luego, necesita encontrar un SEO posicionamiento con casos de éxito reconocibles, independientes del tema.
La cartera de éxitos del SEO posicionamiento debe estar justificada en razones de éxito en internet y no en concepto del cliente. Estas razones deben ser explicadas por el SEO y comprendidas por el cliente para que el trabajo que les toque en adelante se convierta en una dirección exitosa.
También se debe comprender las personas que buscan nuestro producto, no necesariamente nos buscan a nosotros, es decir, con tanta competencia, es poco probable que siquiera conozcan de nuestra existencia.
Hay unas cuantas premisas que parecen obvias, pero no menos importantes: hay que determinar el tipo de cliente que se busca y hacer lo necesario para que nos encuentren.
En el manual de marketing del mundo real, se tiene el concepto de buscar al cliente, en Internet, es lo contrario, es el cliente el que nos tiene que buscar, esa es la mayor revolución de Google, catalogar todo sitio o empresa y convertirse en la herramienta de búsqueda más utilizada.
Bajo esta óptica, muchos conceptos del marketing habitual se encuentran en análisis, por ejemplo, el que indica tener un objetivo geográfico claro; en Internet, la geografía no es el límite del mapa terrestre, sino el del idioma, y aún así, es un límite leve que se soluciona con múltiples lenguajes.
Salvo que se tratase de bienes difíciles de operar, la geografía no parece un problema, hasta se puede invertir en bienes inmuebles a través de operaciones bancarias y financieras digitales, o también productos que pueden trasladarse como electrónica o libros o productos sujetos a leyes locales como comidas o sustancias, en todos los casos, la geografía no es el problema, sino las leyes de transferencia de dinero y productos.
Sea cual sea el producto y el público, en cualquier caso, lo importante es que ese público llegue a nuestro sitio para ese producto, una vez resuelto los problemas que puedan subyacer como traslado, leyes, cantidades, no es raro caer en la sobreabundancia de solicitudes que acarrean problemas de falta de stock, o en situaciones administrativas que puedan generar solicitudes que superen la capacidad física de un negocio de llevarlas a cabo.
Conociendo estos pormenores introductorios, lo más importante, es entonces que nos encuentren en Internet, los potenciales clientes.
Esa es la tarea que realiza un SEO posicionamiento, una persona que estudia las formas y estrategias para colocar con las mejores condiciones un sitio para que Google lo tenga clasificado como la mejor opción cuando sus productos se solicitan, y la mejor opción es estar en la primera página para esas búsquedas.
Es en ese punto que las redes sociales empiezan a ponerse interesantes, es el lugar de reunión de los usuarios, potenciales clientes.
Pero hay que tener en cuenta una premisa importante: en Facebook, nosotros tenemos que buscar a los clientes, es arduo y probablemente inútil, puesto que no conocemos a esos usuarios que serían nuestros clientes. Twitter, es un producto que permite que nos sigan, sin tener nosotros que buscar, pero para ello, el caballo adelante del carro: tienen que saber quiénes somos, cual es nuestro producto, y estamos en la misma situación.
Entonces, cual es la respuesta: Anticiparse, conocer de antemano cuáles serán las palabras con que nuestros clientes podrían buscarnos, y desarrollar una estrategia con esas palabras.
Para ello, mejor que Facebook o twiter, o cualquiera de las redes sociales, lo mejor es participar en sitios en los que podamos publicar nuestros productos, y en los que podamos utilizar las palabras que nos sirven al propósito, entre otras estrategias combinadas como lo es este mismo artículo.